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Cisnes, velas, tutús y Chaikovski: cómo vender sonidos

Ciao ragazzi,

el otro día, quiero decir hace dos meses, fuimos a disfrutar de la “Gala de Ballet con piezas de Tchaikovsky”.

Mamma mia qué manera de coquetear esos cisnes
(y que ganas de chapotear yo también, jajajaja)


Pero no fue solo una gala, nooooooo.


Fue Candlelight
: todo a la luz de las velas (pero no velas “velas”, porque no estamos en el 1700, sino una truca escénica muy pero muy bien hecha que imita las velas).

Centenares y centenares de velas, pero centenares:

debajo del piano, alrededor del cuarteto de cuerdas, de los bailarines, de los cisnes, de los patos, de los gansos, en el proscenio, en los pasillos.

Todo lleno de “velas”.
Todo lleno de publico.
Teatro agotado.


Ahora:

Es posible que si la convocatoria hubiese sido:

“Gran Gala de ballet con 20 bailarines, 5 músicos y músicas de Tchaikovsky”,
hubiera concurrido un 38 % de los presentes en sala, tal vez un 40 %.

Nada en contra de Tchaikovsky, ni del coqueteo de los cisnes y menos aún de los tutús (que en un momento me hicieron acordar a cuando me meto en el mar y se me infla el bañador), pero sí, es muy probable que hubiera concurrido muchísima menos gente de la que había.

Ahora 2:

“Gran gala de ballet con 20 bailarines, 5 músicos, músicas de Tchaikovsky y todo a la luz de las velas”, es otra cosa.

¿A que no?

¡Sala llena!

La empresa que está comercializando la propuesta Candlelight (con hitos de todo tipo: Coldplay-Candlelight, Queen-Candlelight, Hans Zimmer-Candlelight, Vivaldi-Candlelight, y casi lo que se te ocurra-Candlelight) está abriendo sucursales en decenas de ciudades del mundo.

Es un éxito pazzesco, y aquí viene la cuestión.

Ahora 3:

Las bailarinas, los músicos, las partituras son las mismas,

pero las verdadera atracción son las velas, o sea:

lo que veo de lo que escucho,
lo que escucho de lo que veo.

¿Capisci?

lo que veo de lo que escucho,
lo que escucho de lo que veo.

Si quieres vender sonidos, TIENES que ocuparte de cómo se vean. Pero no necesariamente cómo se vean con tus ojos, sino sobre todo con tu imaginación.


Te dejo esta máxima brutal de Santiago Rodríguez:

“Las personas no actúan por lo que oyen,
sino por lo que ‘ven’ en su imaginación cuando oyen”

Forza Tutti

 

 

PD: Si vendes sonidos es probable que te interesen estos 2 libros sobre música de escena y percepción sonora:

”Teatrofonia Vol. 1 – lo sonoro como arte y diseño” – AQUÍ

“Teatrofonia Vol. 2 – normas, estilos y rupturas” – AQUÍ